Los cruces de cuartos

Jugados ya todos los partidos de la fase de grupos, quedaron definidos los cruces para los cuartos de final. Todos serán partidos interesantes y muy duros, el que pierda se va a casa y no tendrá chances de luchar por una medalla.

Haremos también un detalle de las estadísticas de cada equipo como también de sus principales figuras.

Miércoles 8 de agosto - Cuartos de final

14:00 (10:00 de Argentina): Rusia - Lituania

16:15 (12:15 de Argentina): Francia - España

20:00 (16:00 de Argentina): Brasil - Argentina

22:15 (18:15 de Argentina): Estados Unidos - Australia

Todos los resultados de la quinta jornada y cruce de cuartos definidos

Australia ha superado a Rusia con un triple en el último segundo de Patrick Mills. No se jugaban nada, pero el partido se decidió en una frenética recta final. Ambos equipos ya sabían que ocuparían el primer y el cuarto puesto.

Nigeria se despidió de los Juegos de forma digna, poniendo en aprietos hasta el final a Francia gracias a la exhibición de Oguchi, autor de 35 puntos, con 8/14 en triples. Los 21 de Batum, claves para la victoria de una Francia que gracias a la victoria de Estados Unidos clasificó segunda para los cuartos de final.

Túnez estuvo cerca de protagonizar la gran sorpresa de los Juegos, ganando durante 31 minutos a Lituania, pero Songaila, Jasikevicius y Seibutis lideraron la remontada para acabar ganando con cierta claridad. Los lituanos fueron los cuartos del grupo A.

Los locales cerraron su participación en los Juegos Olímpicos con una victoria que no lograba hace 64 años. Los británicos se despiden con buen sabor, a diferencia de China, que se marcha sin conocer la victoria.

España ganaba con relativa cómodo ante Brasil. Comenzó el último cuarto 9 puntos arriba. Sin embargo, Brasil metió un parcial de 31-16 y terminó consiguiendo una llamativa victoria por 88 a 82 ¿Por qué beneficiaba a los españoles perder ante los brasileños? Con la derrota quedó tercera. Si se clasificaba, por llave, se podía cruzar con Estados Unidos en una posible semifinal, algo que finalmente evitó. 

Derrota ante USA, pero a pensar en Brasil...

Podrá ganar. Podrá perder. Pero nunca especulará y menos entregará (un partido). Este es uno de los tantos legados que dejará esta Generación Dorada. Nunca a menos, siempre a más. Siempre entregar todo y jugar con el que toque, aunque haya cansancio o convenga otra cosa. 

Mientras otros equipo no lo entienden y todo el mundo mira a España, por la sorpresiva derrota ante Brasil, Argentina no descansa contra Estados Unidos. No juega light. Sale a ganar, aunque sepa que es muy difícil. Nadie cuida el cuerpo para los cuartos. Todos saben, por experiencia, que lo que se haga hoy se puede trasladar al cruce. Y todos respetan una tradición, una historia, una camiseta, un orgullo... 

Y eso, lo que pasó contra Estados Unidos, más allá de la derrota (126-97), emociona. Y permite mirar con ilusión el gran clásico del miércoles contra Brasil. Sí, como en Mar del Plata hace un año (Brasil ganó en la clasificación y Argentina, en la final) y en el Mundial 2010, el seleccionado se cruzará con Rubén Magnano. Como un capricho del destino. El DT argentino que ayudó a forjar esta camada única estará nuevamente enfrente. Un partidazo.

Primer cuarto de lujo y tranquilidad con Nigeria

Definitivamente, Nigeria es la víctima favorita del torneo. El conjunto africano, entusiasta, pese a no dar una imagen tan gris como la de otros combinados como China, sí que se ha convertido en el saco de recibir puntos del torneo, permitiendo a Estados Unidos batir récords históricos y a Argentina darse un baño de confianza, especialmente en la puesta en escena del partido.

No pudo ser más determinante el primer cuarto, cuyos diez minutos bien podrían ser el reflejo de los otros treinta para cualquier crónica o resumen. Argentina salió con ganas de liquidar el partido por la vía rápida y los nigerianos solo pudieron verse en un par de ocasiones con ventaja (5-4, m.2). Todo el bloque argentino funcionaba. Nocioni, Scola, Delfino, Ginobili… y un Campazzo inspirado de cuyas manos salían las mejores acciones de Argentina.

Un 0-7 devolvió a la realidad a los africanos y, minutos más tarde, otro parcial de 0-9, con Leo Gutiérrez tomando el relevo anotador, puso las cosas en su sitio. A Argentina le salía todo, literalmente, con 14/17 en tiros de 2 y 4/5 en tiros de 3. A Nigeria, por su lado, todo le salía en contra, prolongando esa línea de anotar en cada posesión que empezó hace 48 horas contra Estados Unidos, y lamentándose en los últimos compases del periodo por la lesión en la rodilla deSkinn, el colmo para un primer cuarto horrendo para sus intereses que acabó en 19-37.

La diferencia no era insalvable, pero lo cierto es que ya no hubo partido, con tres cuartos que mañana ya se habrán olvidado. Monotonía y falta de emoción hasta el bocinazo final desde que entre Leo Gutiérrez y Ginobili se encargasen de endosarle otro 0-7 a los nigerianos (21-44). Más tarde, el propio Leo, pondría la máxima (24-50, m.26), si bien el cuadro africano maquilló su desventaja hasta el 37-57 del descanso.

Nigeria, superior en el rebote y sin perder nunca el orgullo, se resignó a que su desventaja siguiera aumentando, y empezó una particular carrera, sin más fin que el de su propio amor propio, para acabar lo más cerca posible de su rival. Con Obasohan de líder, los africanos fueron puliendo su desventaja, y pese a que Scola continuó mostrándose infalible, los nigerianos cumplieron su objetivo de una derrota digna, cayendo por 14 puntos al término del choque: 79-93.

Sorpresas, sustos y esfuerzos inesperados en la cuarta jornada

Esta nueva jornada fue la que más sorprendió en lo que va de los Juegos. 

Rusia dio el batacazo y derroto a España en un apasionante final, donde nuevamente los tiros libre definieron un partido y la mala resolución de la última bola por parte de los españoles permitieron a Rusia quedarse con el 1 del grupo. Desaparecidos Shved y Kirilenki, Rusia encontró su vía de gol de la mano de Fridzon, Mozgov, Ponkrashov y Khryapa.

Francia tuvo que transpirar más de la cuenta para vencer a Túnez por sólo cuatro puntos. Los franceses tuvieron que jugar con todas sus figuras y al máximo nivel para poder llevarse la victoria.

Lituania hizo sufrir al máximo a los estadounidenses, que tuvieron que resolver en los instantes finales, tras un extraordinario partido del conjunto de Kemzura. LeBron James, con 20 puntos, decisivo.


Con cinco jugadores en dobles figuras y una superioridad de principio a fin, Brasil se aseguró la segunda o la tercera plaza, dejando en la cuneta a un combinado chino sin alma ni oposición.


Increíble remontada australiana, con un 29-70 en el segundo tiempo que le aseguró la cuarta plaza del grupo, gracias a un Mills descomunal que acabó con 39 puntos.